Recomendaciones para embarazadas ante el virus del Zika
Desde el Centro de Referencia Epidemiológica de Malformaciones Congénitas de Ente Ríos (Cremcer) se indicaron una serie de recomendaciones para llevar adelante un embarazo saludable y sin riesgos para el desarrollo del bebé.
El Centro de Referencia Epidemiológica de Malformaciones Congénitas de Entre Ríos lleva cuatro años haciendo un seguimiento de todas las alertas que surgen en la provincia, trabajando con pacientes con malformaciones congénitas y haciendo un control epidemiológico de los casos.
La presidenta del Cremcer, Mariel Bordenave, indicó que en un encuentro que tuvieron con el ministro de Salud, Ariel De la Rosa, “abordamos el tema del brote de Zika, ya que desde el Centro hay especial preocupación por esa temática, no solamente por la cuestión infecciosa o la propagación del virus, sino también por los efectos que produce, que son las malformaciones congénitas conocidas como microcefalia”.
En tal sentido, la profesional indicó que “la idea es ponernos a trabajar en conjunto con la Sala de Situación del Ministerio de Salud para hacer alertas y poder estar atentos a cualquier brote que surja e identificar cualquier caso aislado para estudiarlos en profundidad”.
Recomendaciones para las mujeres en edad reproductiva que estén por viajar
En el caso del Zika el problema puede surgir con mujeres que quedan embarazas y lo desconocen, porque este virus afecta durante los primeros meses y en las primeras seis semanas de gestación altera el desarrollo del cerebro del niño.
Desde el Cremcer se indicó que lo ideal sería la programación del embarazo para hacer un seguimiento desde el primer momento junto a los médicos, pero en la mayoría de los casos la mujer lo confirma cuando está cursando algunas semanas de gestación. Por lo tanto, las recomendaciones generales para toda mujer en edad fértil o embarazada que esté viajando, es que usen mangas largas, pantalón largo, repelentes y que en las casas no tengan lugares de almacenamiento de agua. “Son todas las recomendaciones que se hacen para el dengue, porque el mosquito que transmite el virus del Zika es el mismo”, recordó la genetista Andrea Chirino.
Ante alguna sospecha o ecografía en la que haya cualquier patología, se debe informar al Cremcer para que desde allí tengan en cuenta a esa mujer y puedan controlarla.
Un trabajo sostenido
El Cremcer, creado por la Ley 10.048 en 2011, ha venido trabajando de modo sostenido desde entonces. En un principio en los hospitales Masvernat de Concordia, Urquiza de Concepción del Uruguay, Centenario de Gualeguaychú y San Roque de Paraná; con el tiempo se incorporaron los hospitales San Antonio de Gualeguay, Santa Rosa de Villaguay y 9 de Julio de La Paz, y en el presente también reciben derivaciones de centros menores en los cuales han designado referentes.
“Tenemos referentes en toda la provincia, que son los médicos ginecólogos o pediatras que hacen las veces de puente, nos comunican los casos que ellos descubren o diagnostican en los hospitales o bien los derivan por nuestra vía al hospital San Roque para que la genetista los diagnostique. Desde entonces se ha incrementado el trabajo en red”, explicó Bordenave.
Hoy se atienden en Paraná consultas que de otro modo habría que derivar a Buenos Aires, con todo lo que implica el traslado de pacientes pediátricos, en algunos casos nonatos. En el Centro se les hace la revisación y se entregan los certificados de discapacidad, con los que la ley los ampara para obtener toda la recuperación y las terapias.
En la actualidad se atiende un promedio de 25 a 30 pacientes mensuales; los estudios requeridos se realizan en Paraná como así también las rehabilitaciones, beneficiando al paciente y su entrono familiar con una menor movilización, además de que el paciente va quedando en la provincia y mejora el ritmo con el cual se atiende.
“No solo por lo que representa en traslados, también hotelería, el alojamiento del médico acompañante si fuera en ambulancia, y en el caso de que llegaran al hospital Garrahan y se les indicaran estudios específicos, pagarlos; así que todo esto ha significado un ahorro de recursos de todo tipo y una mejora en los diagnósticos”, resaltó la directora del Cremcer.
Desafíos
Desde el Cremcer expresaron que el desafío más importante es no sólo mantener lo hecho hasta ahora, sino mejorarlo: aumentar la rapidez en la que se realizan las denuncias de casos de malformación y a su vez mejorar todo lo relacionado con el diagnóstico