CAE abandono el canje de terrenos por salón de fiestas

El club preveía desprenderse de tres lotes sobre calle Bertozzi valuados entre 8 y 11 millones de pesos, a cambio de un salón de fiestas llave en mano en el Golf para alquilar, con un costo estimado de 22 millones.


 

GolPar1La controversia duró sólo algunas horas, hasta que circuló la comunicación oficial de la Comisión Directiva del Club Atlético Estudiantes (CAE): “Teniendo en cuenta las diversas opiniones y en uso de las atribuciones estatutarias, hemos resuelto dejar sin efecto el proyecto, lo que ha comprendido la empresa Pilay SA”.
El “proyecto” al que alude el texto difundido consiste en la construcción de un salón de fiestas en el predio del campo de golf del club, ubicado en la zona de El Brete, con idea de alquilarlo y así recaudar fondos. El costo de la obra rondaría los 22 millones de pesos.

La alusión a Pilay SA, empresa que desde su fundación en 1976 ya ha construido 85 edificios en la región, es porque para financiar la construcción del salón se iban a entregar tres lotes con una superficie total de 1.100 metros cuadrados valuados en unos 10 millones de pesos.

Los pormenores de la iniciativa fueron puestos a disposición de los socios y publicados en la página web del club www.caeparana.com.ar. “Un largo y meticuloso análisis nos ha llevado a entender que es una muy buena oportunidad de agregar valor a los recursos del club”, se explicó desde la Comisión Directiva que preside Eduardo Fouces.

A través de la web se aclaró que “financieramente el CAE está equilibrado”, pero se argumentó que “los costos de personal se llevan prácticamente el 100% de los ingresos por cuotas societarias” para señalar que “se hace muy difícil atender un sinnúmero de necesidades extra”.

El proyecto del salón, a cargo del estudio de arquitectura Graciela Dujovne & Asociados, fue señalado como “una fuente de ingresos extraordinarios” y se describió como la transformación de “un inmueble improductivo y con poca posibilidad de desarrollo por su ubicación dentro del club, en un inmueble productivo por su posibilidad de renta”.
Oposición
Socios del club manifestaron su rechazo al proyecto y en Facebook crearon un grupo denominado “El patrimonio del CAE es de los socios” que cosechó cerca de 300 miembros en pocas horas . Allí se mostraron “preocupados por la decisión de la comisión directiva de vender terrenos de la sede social con el objetivo de construir un salón de fiestas y convenciones en las instalaciones del golf”.

“Debemos ser los socios, soberana y debidamente informados, los que resolvamos si los proyectos son adecuados y prioritarios para las necesidades de nuestro club. No queremos que se venda ni un metro cuadrado”, argumentaron al presentarse en la red.

Estos socios planificaron una reunión para el 24 de mayo, previa a la asamblea convocada por la comisión directiva para debatir el proyecto, que iba a ser el 12 de junio. La resistencia de este grupo, más opiniones adversas en subcomisiones de algunos deportes, motivaron la declinación de la iniciativa.
Marcha atrás
“Luego de varios meses de trabajo, estábamos en el total convencimiento de que el proyecto que se ponía a consideración de los socios era serio y conveniente para nuestra institución, ya que había sido aprobado por unanimidad en reunión de comisión directiva, donde están representadas todas las disciplinas”, se expuso en el comunicado.

Más adelante, se reconoció que se generó “una importante diversidad de información no siempre bien intencionada” y se mencionaron “opiniones vertidas en el marco del respeto y otras lamentablemente llenas de pensamientos mezquinos” para luego informar que se dejaba sin efecto el proyecto.

La alusión probablemente sea a comentarios vertidos en las redes sociales. “No queremos un salón de joda en el golf”, “Con la excusa del bien común se hacen negocios que perjudican al club” y “Es un negocio para pocos” son algunos de los comentarios posteados por miembros del grupo creado en FB.

Los dirigentes se despidieron agradeciendo a quienes trabajaron en el proyecto y también “a quienes, con respeto, expresaron su disenso”, al tiempo que convocaron a los socios a sumarse a “trabajar en el desarrollo de proyectos e ideas”.
Detalles
En la web del club se publicaron detalles del salón de fiestas y convenciones diseñado por Graciela Dujovne y una proyección de costos que alcanza los 22.810.965 pesos, a la que se llegó, según se informa, en base a “presupuestos solicitados a referentes locales de los distintos rubros”. Superficie divisible de 600 metros cuadrados cubiertos, capacidad para 700 personas, estacionamiento para 120 autos, terraza/mirador semicubierta, pérgolas y jardines son algunas de las características que planificó el estudio de arquitectos Graciela Dujovne & Asociados, en una intervención total superior a los 2.000 metros cuadrados.

La idea de construir el salón de fiestas, así denominado aunque con intención de alquilarlo también para convenciones, conferencias y otras actividades -de acuerdo a un plan de negocios especialmente desarrollado y también publicado en la web- fue gestada hace un año por las autoridades del club.

La escasez de lugares de esta naturaleza en la ciudad fue un elemento tenido en cuenta, se explica, al tiempo que se pone a disposición un video donde se muestran planos e imágenes 3D del salón y sus comodidades.

Para hacer realidad el proyecto, se avanzó en un “preacuerdo de asociación estratégica” con la firma Pilay, vinculada a los emprendimientos del club desde 2000, cuando donó aulas para la escuela de la institución y, además, es auspiciante del rugby.

En virtud de ese convenio, el club debía canjear el salón por el terreno situado sobre calle Bertozzi, entre Los Vascos y Nux, al que se hizo tasar por tres inmobiliarias locales: Alfa Negocios Inmobiliarios lo valuó en 585.000 dólares; Florencio Bogado en 600.000 dólares; y Benvenuto y Zanni en 11.224.000 pesos.

Lo que se pensaba hacer era una operación de las denominadas “llave en mano” a través de la cual el club cedía las tierras y a cambio obtenía el salón listo para su funcionamiento, “sin invertir un peso”. En la web se destaca que el valor de la construcción del salón “duplica el valor de plaza de los lotes”.

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